PROYECTO DE LA NUEVA PLAZA DE HUEPIL

Con la memoria aún fresca tras la reciente inauguración de la nueva plaza de Tucapel, el Minvu y la municipalidad comenzó el proceso correspondiente a la definición del ante proyecto de la plaza de Huépil por medio de una primera reunión con las autoridades locales y vecinos en general, la que se efectuó este lunes 13 de abril en el gimnasio Bicentenario. Fue precisamente MIL Consultores la empresa que se adjudicó el diseño de este fundamental centro cívico de la capital comunal, empresa representada por su consultor y jefe de proyecto, Enrique Matuschka, la que tendrá el desafío de aunar y conciliar las propuestas de la comunidad para crear el proyecto definitivo que tendrá un costo de ejecución aproximado de $632.975.000, inversión colocada por el Programa de mejoramiento de espacios Públicos del Minvu. Es así como, en una primera presentación, la consultora detalló los alcances de la inversión al alcalde José Antonio Fernández; las concejalas Dina Gutiérrez y Magaly Jara, además de Directores municipales y vecinos en general, quienes posteriormente, se integraron a distintos grupos de trabajo para representar, en un plano tipo, el concepto del diseño así como sus elementos interiores. Dentro de las ideas recogidas, coincidentes fueron las apreciaciones sobre conservar la mayoría de los árboles existentes, la incorporación de mobiliario anti vandálico, nueva iluminación, áreas cívicas y recreacionales, así como un concepto integrador entre el mundo rural y urbano. A pesar de la relevancia de este proyecto, Fernández lamentó que la concurrencia no fuera mayor, ya que estas instancias de participación son limitadas, quedando posteriormente solo dos reuniones más para que cualquiera observación quede determinada en el proyecto definitivo que deberá tomar la empresa que adjudique su construcción. Sin embargo, rescató que en el trabajo grupal, la mayoría de las posiciones fueran coincidentes, donde también se está tratando de privilegiar, entre otras sugerencias, que los espacios sean tanto aptos para adultos mayores como niños, con la mirada de que tenga, al menos, una vida útil cercana a los 50

años.