En las últimas semanas la Asociación de Funcionarios Municipales de Cabrero está adherida a un paro nacional, de carácter legal, que sin duda afecta a los usuarios, pero que tiene fundamentos sólidos que buscan por ejemplo equidad salarial, reajuste digno y aumento de planta funcionaria, siendo éste último punto el que va en beneficio de la atención de los usuarios. Sin embargo lo que más ha llamado la atención de este paro, entendiendo las molestias que puede traer a la comunidad, es la intención de politizar de algunos, quienes han recalcado constantemente que es una idea del Alcalde de la comuna o de la oposición del Gobierno, que es un “paro político” donde desacreditan al gremio, señalando que son azuzados para manifestarse, como si no tuvieran autonomía o decisión propia.
Detrás de las dirigencias gremiales hay socios que democráticamente deciden los pasos a seguir, desacreditar sus acciones es un atropello, es una ofensa pues los desvalida como organización. Aquí quienes hablan de “paro político” son quienes realmente lo están politizando, diciendo que es encabezado por la Asociación Chilena de Municipalidades, cuando ellos han recalcado que el objetivo es buscar una pronta solución a través del diálogo. Quienes señalan que es intervencionismo político son quienes no contribuyen a solucionar el conflicto y entrampan con sus comentarios el diálogo, y distorsionan el sentido de la movilización indisponiendo a los funcionarios con la comunidad a la cual sirven.
Ciertamente la movilización ha traído problemas a los vecinos de nuestra comuna, pero no podemos tergiversar el real sentido de un expresión justa de los derechos de los trabajadores.
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