La palabra “pipeño” proviene de un tipo de vasija en el que era transportado el vino, el cual se destaca porque nunca es igual a otro, debido al proceso artesanal por el que pasa, en que cada viticultor le otorga su sello propio.
“Pipeño, una Memoria que Porfía”, se trata de una producción que surge de la investigación de la antropóloga de ONG CETSUR, Paula Mariángel, la guionista Marcela Bahamonde y la fotógrafa María Victoria Hernández, que posteriormente dio origen al libro “Viñas y Toneles del Itata. Patrimonio, Memoria e identidad en la Producción del Vino Pipeño”. El documental fue dirigido por el realizador Marcelo Gotelli.
Con una duración de 51 minutos, esta pieza audiovisual, invita a conocer las historias y vivencias de protagonistas del mundo campesino donde se produce este legendario vino, cuyo valor histórico no reside solo en la elaboración del mosto y sus técnicas, sino que en los saberes y tradiciones que engloba y transmite.
Este es un trabajo de ONG CETSUR, financiado con aportes del Gobierno Regional del Biobío y el Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio a través de su programa OIC. Anteriormente, esta institución produjo el documental “Saberes y Sabores del Itata”, que fue galardonado por el Arara de Ouro en el Tour Film Brazil 2011.
El jueves 08 de noviembre a las 17:00 hrs se exhibirá el documental en la Casa de la Cultura de Ñipas, con entrada liberada. Con este hito cinematográfico, la comuna de Ránquil dará el vamos vigésima segunda versión del Concurso del Vino de Ránquil y del Itata Profundo (en Ñipas, 24 y 25 de noviembre), extendiéndose más allá de las fronteras comunales, para competir y mejorar, pero sobre todo aunar lo mejor de estos mostos de la tierra del Itata, particularmente especiales por conservar métodos tradicionales de producción.
Gracias a estas actividades se reivindica un legado patrimonial, escasamente reconocido, poniendo en valor la producción vitivinícola de la zona.
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